En una celebración vibrante y llena de color, el cantón de Escazú se unió para rendir homenaje al Día Nacional de la Marimba Costarricense, destacando no solo la importancia cultural de este instrumento, sino también el papel crucial que desempeña en la preservación de las tradiciones locales.
Escazú, conocido por su rica herencia cultural, se convirtió en el escenario perfecto para la celebración, evento que no solo fue una oportunidad para disfrutar de la música y el ritmo característico de la marimba, sino también para destacar el rescate de tradiciones en la comunidad.
En los últimos años ha surgido un renacer de interés en el arte de la marimba en el cantón, atrayendo tanto a jóvenes como a adultos. Talleres y programas educativos han facilitado el aprendizaje de este instrumento emblemático, proporcionando a los residentes de la oportunidad de conectarse con su patrimonio cultural de una manera única.
La celebración estuvo impregnada de una atmósfera festiva, donde la música de la marimba resonó en el parque central de Escazú con grupos locales y artistas destacados que se unieron para ofrecer actuaciones llenas de energía, cautivando a los asistentes con melodías que evocan las raíces culturales de Costa Rica.

Pero la celebración no se limitó solo a la música, el baile desempeñó un papel igualmente importante. Residentes de todas las edades se unieron para disfrutar de las piezas tradicionales, dando vida a las antiguas danzas que han sido parte integral de la cultura escazuceña.
Más allá del mero entretenimiento, la celebración del Día Nacional de la Marimba, Escazú también subrayó la importancia de preservar la cultura nacional y local.
La marimba no es solo un instrumento musical, sino un símbolo arraigado en la identidad costarricense y su promoción y conservación son esenciales para la continuidad de la rica diversidad cultural del país.

En Escazú la Escuela Municipal de Artes ha trabajado arduamente para fomentar la apreciación de la marimba entre los más jóvenes, garantizando así que este tesoro cultural siga vivo para las futuras generaciones.
En esta fecha especial de la marimba que su día es el 30 de noviembre de cada año, por Ley 9419 firmada por el expresidente de la República, Luis Guillermo Solís Rivera, se pudo disfrutar a un grupo de jovencitas tocando ese instrumento de percusión, quienes dieron sonido y produjeron notas musicales dando golpes a las láminas de madera de distintos tamaños dispuestas de mayor a menor, como se compone ese emblemático símbolo de la riqueza tradicional costarricense.
La vena musical de las tres señoritas viene de familia de grandes músicos escazuceños que heredaron y que ahora construyen su propio legado dándose a conocer en presentaciones como en este 2023 en el Día de la Marimba Nacional.
Luis Guillermo Ramírez Mora es descendiente directo de los fundadores de la Marimba Escazú, siendo su padre el reconocido marimbista Guillermo Ramírez, de quien aprendió su técnica y la de su tío Lalo, que en la actualidad enseña a quienes gustan aprender del instrumento.

Esta celebración en Escazú no solo fue un tributo a la música y la destreza de los marimbistas, sino también un recordatorio de la importancia de preservar nuestras tradiciones.
Al respecto, el alcalde Arnoldo Barahona enfatizó que “la marimba es una parte intrínseca de la cultura escazuceña, una parte de nuestra idiosincrasia que hoy rendimos homenaje a ese maravilloso instrumento que en manos de mujeres hace vibrar la historia de este cantón, siendo también un buen momento para reunirnos en familia, vísperas de la Navidad”.
En este rincón de Costa Rica, la marimba no solo suena, sino que resuena como un lazo que une a la comunidad fortaleciendo su identidad cultural única.























